Reciente Blog

Muchas personas me preguntan, ¿qué debo hacer si los años se me pasan y no encuentro la persona que necesito para formar una familia? Esa es una relidad. Muchas personas llegan al desespero porque no concretan nada. Se desaniman porque las realciones que han tenido no duran mucho tiempo, porque hay traiciones, porque se desepcionan, porque los intereses no son comunes, etc. Entonces, ¿qué hacer?

El matrimonio es una vocación. Es Dios quien llama al matrimonio. Las vocaciones no se pueden forzar. No le podemos obligar a Dios que haga nuestros planes o echarle la culpa porque las cosas no salen como queremos.

Si realmente queremos y confiamos en Dios entonces hay que dejarle que haga con nuestras vidas lo que Él quiere. Ponernos en sus manos y decirle como le dijo la Virgen María: Has de mi loq ue tu quieras. Y, entonces, veremos milagros. Se trata de darle permiso a Dios para que Él haga su plan de amor en nuestras vidas.

Lo importante, realmente, en la vida no es casarse o no casarse sino hacer la voluntad de Dios. De hecho creo que muchos matrimonios fracasan porque no discirnieron antes si esa era la voluntad de Dios. Entonces los días pasan y los problemas comienzan. Cuando hacemos la voluntad de Dios tenemeos certeza de que seremos felices.

Lo que te recomiendo es que reces, que te pongas en manos de Dios, que asumas el peso de la cruz de no poder hacer lo que quieres y aceptar lo que Dios quiere. Entonces serás libre y verás cosas grandes.

Dios te bendiga.