Fue un típico sábado por la mañana cuando oí el teléfono sonar. Al contestarlo una de mis mejores amigas comenzó muy excitada, "¡Fue un primera cita perfecta!" Entonces pasé la siguiente hora escuchando cada detalle mágico de la cita de mi amiga la noche anterior. Conoció a un caballero encantador en una gala de caridad y disfrutamos de nuestra compañía mutuamente. El la invitó a salir a cenar y aparentemente la noche fue un gran éxito. Ambos se rieron de los mismos chistes, amaban las mismas películas y realmente disfrutaron la compañía de uno y otro.
Al estar escuchando esta descripción muy entusiasmada con la esperanza subyacente que estaba floreciendo una nueva relación, solo un pensamiento vino a la mente. Por fin le pregunté, "y qué pasa con la fe? ¿También es católico? ¿Le preguntaste?" La respuesta de mi querida amiga me dejo un poco triste. "No le pregunte. Sentí que era demasiado pronto."
Como una experta de relaciones basadas en la fe , una de las primeras preguntas que generalmente me preguntan es, "¿Cuándo es el momento adecuado para discutir mi fe y creencias cuando saliendo con alguien nuevo?" Me encanta esta pregunta porque la respuesta generalmente sorprende a la mayoría de gente.
Cuando estas soltero no hay casi nada más romántico que la esperanza de conocer a alguien nuevo. Desde aquellas mariposas iniciales en el estómago, a esa sonrisa que se cruza en tu cara cuando te das cuenta que ambos tiene el mismo sentido de humor. El Señor nos dio el regalo del amor romántico para compartirlo en una unión matrimonial. La mayoría del tiempo el primer paso hacia la realización de ese regalo es el conocer a alguien y tener una primera cita.
Las primeras citas puede ser muy divertidas, un poco miedosas, estresadas, una montaña rusa emocional, y a veces son pura magia. Con todos estos torbellinos de emociones, la primera cita también es el momento perfecto para aprender acerca de la fe de la otra persona. La fe es la fundación del alma de una persona y la relación de la pareja con el Señor. La fe es todo. Hablando de fe durante la primera cita no es no romántico, o demasiado pronto, sino más bien una indicación clara que se ama uno mismo y sabes lo que es verdaderamente es más importante en tu vida.
Amablemente compartí este consejo con mi amiga y le recordé que confiara en Dios en este viaje. Si esta es la relación correcta, la discusión de fe tempranamente solamente los unirá mas. Si esta no es la persona correcta, esta discusión te permitirá de seguir adelante antes de que tu corazón se enrede y corra el riesgo de ser lastimada realmente.
Regalo De Hoy Para Tu Alma
Según comienzas tu camino Cuaresmal y quizás te encuentras orando al Señor que te bendiga con un compañero amoroso en la vida, recuerda que ya eres amada incondicionalmente. Toma consuelo en el Salmo 9:10 "Aquellos que conocen tu nombre confiarán en ti, porque tu, Señor, nunca has abandonado aquellos que te buscan".
Comentarios (0)